Aún las provincias que no participan del Consenso Fiscal expresaron su acuerdo. En el Gobierno dicen que el jefe de gobierno porteño busca mostrarse como víctima.
El presidente Alberto Fernández reunió este mediodía a todos los gobernadores para la firma del Consenso Fiscal 2020, en una postal de la que sólo quedó afuera el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, enfrentado con la Casa Rosada por el recorte de los fondos para la policía. El mandatario resaltó que el acuerdo es «el mejor corolario» tras el trabajo conjunto entre la Nación y las provincias durante la pandemia del coronavirus.
«Este acuerdo tiene que ver con la responsabilidad de cómo vamos a crecer con sensatez y cómo vamos a encarar el futuro juntos, no por el espanto de un virus sino por la oportunidad de construir nuestro propio destino», agregó durante el acto. Además, pidió «no dejar pasar la oportunidad que tenemos de hacer las cosas bien de una vez y para siempre».
Entre sus puntos principales, el Consenso Fiscal les permite a las provincias tomar deuda en pesos -«una estrategia para el endeudamiento responsable», denomina- y suspender las exenciones y reducciones impositivas pactadas en el acuerdo de 2017, durante el gobierno de Macri. Con el impacto que la pandemia generó en las cuentas provinciales, los gobernadores están ansiosos por tener herramientas para mejorar la situación. En ese ámbito, tienen poco quórum las quejas de CABA, con una situación mucho más holgada que el promedio. Otro punto es que las provincias deben suspender por un año los reclamos judiciales a la Nación, algo con lo que Rodríguez Larreta no quiere saber nada ya que imagina a la Corte Suprema como la instancia que puede favorecerlo.
El cálculo que hicieron Batakis y su equipo fue que la suma para sostener a la policía federal traspasada es de 24.500 millones de pesos. Pero, a pedido de los diputados de Córdoba, se resolvió que la ley que votará el Congreso la semana próxima no se coloque esa suma sino que se establezca una mesa de discusión por 60 días en la que participarán representantes de Nación, Ciudad y de la CFI (Comisión Federal de Impuestos), donde están representadas todas las provincias, para acordar un nuevo monto. Pero a los funcionarios porteños tampoco les gustó la salida, dando por hecho que no conseguirán mejoras. La estrategia de Rodríguez Larreta pasa por acudir a la Justicia, donde imagina que le puede tener más suerte.