La jefa del ministerio público, Patricia Benavides, indagó a la mandataria por las represiones que ya dejaron al menos 48 civiles muertos, más una docena de militares y policías.

La presidenta de Perú, Dina Boluarte, fue interrogada este martes por la Fiscalía de la Nación que investiga la represión de las protestas que sacuden al país desde hace tres meses y dejaron al menos 55 muertos, sin que trascendiera el contenido de su declaración, informó la prensa local.
Mientras tanto, la comisión parlamentaria que había prometido emitir este martes un dictamen para que el pleno del Congreso pudiera volver a considerar un eventual adelanto de las elecciones generales previstas para 2026 suspendió la sesión sin llegar a una conclusión.
La mandataria de 60 años compareció ante la fiscal de la Nación, Patricia Benavides, por casi una hora y media y “brindó declaraciones respecto a las investigaciones”, informó, sin dar más detalles, la Presidencia peruana a través de Twitter.
Más temprano, la fiscalía precisó que la gobernante fue citada en el marco del “caso de las muertes de ciudadanos ocurridas durante las movilizaciones sociales de diciembre de 2022 y enero de 2023”.
Boluarte, quien cumplió este martes tres meses en el gobierno, llegó al interrogatorio fuertemente escoltada, sonriente y con un traje celeste, según las imágenes que compartió en redes sociales la fiscalía.
La cita se cumplió sin manifestaciones a favor o en contra en los exteriores del edificio en el centro de Lima.
Ella tiene “toda la voluntad de querer coadyuvar en la averiguación de la verdad y de la investigación en concreto”, dijo recientemente su abogada Kelly Montenegro al diario El Comercio.
No obstante, en caso de una acusación firme, no podrá ser sometida a juicio hasta que culmine su mandato, según establece la Constitución.
La fiscalía abrió el 10 de enero una investigación contra Boluarte por los presuntos delitos de “genocidio, homicidio calificado y lesiones graves” durante las manifestaciones antigubernamentales de diciembre de 2022 y enero de 2023 en las regiones Apurímac, La Libertad, Puno, Junín, Arequipa y Ayacucho.
Perú vive una ola de protestas cotidianas desde el 7 de diciembre pasado, cuando el Congreso destituyó al presidente Pedro Castillo luego de que este anunciara la disolución del parlamento y la formación de un gobierno excepcional con supresión de garantías constitucionales.
En ese contexto murieron 55 personas (48 civiles, un policía y seis militares) en enfrentamientos y otras 11 como consecuencia de los bloqueos de rutas, y al menos 1.301 resultaron heridas (incluidos 329 policías y seis militares), según el último balance de la Defensoría del Pueblo, publicado esta tarde.
Télam